I.E.A.G SEDE SAN JOSÉ

I.E.A.G SEDE SAN JOSÉ

El presente Blog ha sido creado con la finalidad de establecer un medio de educación virtual entre los estudiantes de la I.E. Atanasio Girardot Sede SAN JOSÉ y su docente para hacerle frente problemáticas que se presentan en la actualidad. Para acceder a los contenidos, los estudiantes deben seleccionar el grado al que pertenecen y allí realizar las actividades propuestas.

jueves, 30 de abril de 2020

LEYENDO ME DIVIERTO CUENTO




Había una vez un gato muy grande. Tan grande, pero tan grande, que no pasaba por ninguna puerta. Tan grande, pero tan grande, que cuando estaba enojado y hacía ¡FFFFF! Se volaban todas las hojas de los árboles. Tan grande, pero tan grande, que cuando hacía ¡MIAUUUU! Todos creían que habían llegado los bomberos porque había un incendio.

Y había también un gato muy chiquito. Tan chiquito, pero tan chiquito, que dormía en una latita de paté y, cuando hacía frío, se tapaba con un boleto capicúa. Tan chiquito, pero tan chiquito que, cuando andaba de acá para allá, todos lo confundían con una pelusa. Tan chiquito que, para verlo bien, había que mirarlo con microscopio.

El Gato Grande era muy famoso en el barrio.

Todos los vecinos hablaban de él y lo mimaban mucho.

—¡Qué gato tan hermoso! —decían.

—¡Los gatos grandes son hermosísimos! —decían.

El Gato Grande comía mucho. A la mañana bien temprano los vecinos le traían cinco palanganas de leche tibia. Al mediodía le traían una carretilla de hígado con mermelada (que era su comida favorita). A la tardecita le dejaban preparada una bañera de polenta, por si se despertaba con hambre en la mitad de la noche. Cuando los vecinos le traían la comida, el Gato Grande sonreía (porque algunos gatos saben sonreír) y se ponía a ronronear. Cuando el Gato Grande ronroneaba hacía un RRRRRRRRRRR tan fuerte que todos miraban para arriba porque creían que pasaba un helicóptero por el cielo.

El Gato Chiquito, en cambio, no era nada famoso. Nadie hablaba de él en el barrio y nadie lo mimaba ni un poquito. (En realidad, al Gato Chiquito casi nadie lo veía siquiera.)

Al Gato Chiquito nadie le traía comida nunca. Ni a la mañana. Ni al mediodía. Ni a la tardecita.

Claro que el Gato Chiquito comía muy poco. Con dos gotas de leche tenía bastante. Y una aceituna le duraba una semana. (Al Gato Chiquito le encantaban las aceitunas.)

Cuando el Gato Chiquito encontraba una aceituna, aunque nadie lo veía, también sonreía. Y, aunque nadie lo escuchaba, también ronroneaba.

Un día el gato Chiquito salió a dar un paseo. Y caminó y caminó por la calle más larga del barrio. Tip tap tip tap tip tap, caminaba el Gato Chiquito. Y ese mismo día el Gato Grande también quiso salir a dar un paseo. Y caminó y caminó por todas las calles, y también por la calle más larga del barrio. Top tup top tup top tup, caminaba el Gato Grande.

El Gato Chiquito y el Gato Grande caminaron y caminaron. Cada vez que el gato Grande caminaba dos cuadras, el Gato Chiquito terminaba una baldosa. Y cuando el sol estaba bien alto, pero bien alto, el Gato Grande y el Gato Chiquito se encontraron frente a frente. Los dos en la misma vereda de la calle más larga del barrio. El gato Grande hizo ¡FFFFF! Para mostrarle al Gato Chiquito que él era el más fuerte. Hizo ¡FFFFF! Para que el Gato Chiquito lo dejase pasar primero. Pero el Gato Chiquito no se movió de su baldosa. Ni un poquito. Entonces el gato Grande hizo ¡FFFFFFFF! (Fue un ¡FFFFF! muy fuerte.)

Y el Gato Chiquito rodó como una pelusa hasta el cordón de la vereda. Y se cayó en charquito tan hondo pero tan hondo que casi se ahoga. Pero no se ahogó. Nadó hasta la orilla del charco y se trepó de nuevo al cordón. (El Gato Chiquito era chiquito, ¡pero valiente!) Se subió de un salto a un adoquín que había por ahí y él también hizo ¡fffff! (fue un ¡fffff! muy chiquito). El Gato Chiquito hizo ¡fffff! porque él también estaba enojado.

Y ahí se quedaron los dos, frente a frente.

Al Gato Grande, el Gato Chiquito le parecía más chiquito que una arveja. Al Gato Chiquito, el Gato Grande le parecía más grande que una ballena.

Entonces el Gato Grande se enojó muchísimo más. Se enojó como sólo pueden enojarse los gatos grandes.

Estiró una pata y sacó las uñas. (Tenía unas uñas filosas como espadas filosas.) Y ¡zas! Le dio un zarpazo al Gato Chiquito. Pero el Gato Chiquito no tuvo miedo. De un salto se subió a la pata del Gato Grande y le tiró con mucha fuerza de los pelos cortitos que le crecían justo al lado de las uñas filosas. (A los gatos les duele muchísimo cuando les tiran de los pelos cortitos, sobre todo si son los que crecen al lado de las uñas filosas)

Miauuuu —maulló el Gato Grande.

Y fue un MIAUUUU tan fuerte que trescientos cincuenta y dos vecinos vinieron a ver qué pasaba. Los trescientos cincuenta y dos vecinos se pusieron en ronda a mirar. Todos miraban con ojos redondos, pero nadie entendía nada de nada. Todos veían al Gato Grande, que se revolcaba por el suelo y maullaba y maullaba y maullaba. Pero nadie veía al Gato Chiquito, que estaba bien escondido entre los pelos del Gato Grande. Y corría por el lomo... de la cabeza a la cola... de la cola a la cabeza... y se trepaba a una oreja... y se hamacaba en los bigotes... y le hacía cosquillas en la nariz y... Aaachus —estornudó el Gato Grande.

Y los trescientos cincuenta y dos vecinos que miraban con ojos redondos salieron volando por el aire como barriletes. Todos menos el Gato Chiquito, que estaba bien agarrado del bigote más gordo del Gato Grande y resistió el estornudo.

Los trescientos cincuenta y dos vecinos fueron volviendo, poco a poco. Ya no tenían los ojos redondos. Ahora tenían las cejas fruncidas. Estaban bastante enojados. Se habían dado cuenta de que no le gustaba salir volando por el aire como barriletes. Tampoco les gustaba tener que oír un MIAUUU más fuerte que la sirena de los bomberos. Empezaron a protestar.

—¡Este gato está demasiado grande! —decían.

—¡Los gatos tan grandes son muy molestos! —decían.

Y después todos juntos dijeron:

—¡Ufa!

Y el Gato Grande le dio vergüenza y se puso colorado (porque algunos gatos se ponen colorados). Entonces el Gato Chiquito se bajó de un salto del bigote del Gato Grande y se empezó a pasear por la vereda. Iba y venía. Y daba otro saltito.

—¡Oia! ¡Un gato chiquito! —dijeron todos.

—¡Más chiquito que una arveja! —dijeron.

—¡Los gatos chiquitos son hermosísimos! —dijeron.

Y desde ese día, en el barrio, los gatos famosos son dos: el Gato Grande y el Gato Chiquito. Claro que las cosas cambiaron un poco.

Los vecinos ya no le dan tanta comida al Gato Grande. Nada más que tres palanganas de leche tibia y media carretilla de hígado con mermelada. Al Gato Chiquito, en cambio, le llevan dos pedacitos de hígado, tres aceitunas y un dedal de leche cada mañana.

Parece ser que ahora el Gato Grande está bastante menos grande. Cuando hace ¡FFFF! Ya no tira más que diez o doce hojas de los árboles. Y parece que el Gato Chiquito está empezando a crecer.


miércoles, 29 de abril de 2020

Me divierto leyendo...




TRABAJO EN CASA... ABRIL 30

Recuerdo desarrollar las actividades del día con alegría, compromiso y mucha actitud positiva, por ello, me divierto un poco leyendo..



















INICIO DE TRABAJO EN LAS CARTILLAS EN CASA


 EN CASA, TAMBIEN PUEDO TRABAJAR ... ABRIL 29

Muy buenos días, hoy iniciamos con el desarrollo de las cartillas, recuerdo tener en cuenta las indicaciones de mi maestra para la solución de las actividades.



REFLEXIONO 








EL CORONAVIRUS 



martes, 28 de abril de 2020

ENTREGA DE MATERIAL DE TRABAJO ABRIL 28


ENTREGA DE MATERIAL DE TRABAJO IMPRESO


El día de hoy se le hizo entrega de las cartillas a cada uno de los padres de familia en la I.E.A.G sede san josé, para que los niños desarrollen en  casa en compañía de sus padres y con la asesoría de su maestra, estar pendiente de las indicaciones diarias.


Muchas Gracias a la institución  educativa Atanasio Girardot en cabeza del rector Edgar Peñaloza, al señor alcalde  Diego Agudelo y a todo su equipo de trabajo por hacer posible las cartillas.


viernes, 24 de abril de 2020

ABRIL 25 DIA DEL NIÑO

ABRIL 25 DIA DEL NIÑO

 Para todos los niños de nuestra institución, feliz día que lo distruten al máximo con sus familias.






ACTIVIDADES QUE PUEDO HACER EN CASA CON MIS HIJOS PARA  CELEBRAR EL DÍA DEL NIÑO


Algunas ideas que puedes tomar en cuenta:
1.-Organizar una búsqueda del tesoro por toda la casa, dejando pistas en lugares escondidos.
2.- Hacer un día de "campamento" con un fuerte hecho de sábanas y tener un picnic en el piso con su comida favorita.
3.- Hacer una tarde de karaoke y concurso de talento.
4.- Hacer sus propios disfraces con cosas en casa y montar una obra de teatro corta.
5.  en conjunto la comida favorita de tus hijos e hijas u hornear unas galletas especiales.
6.- Colorear mandalas o libros de dibujos que tengas en casa y hacer una exposición de sus obras.
7.- Realizar una clase divertida de yoga en conjunto con los videos del canal Cosmic Kids Yoga, donde los pequeños podrán divertirse con los distintos escenarios y propuestas.
8.- Organizar una tarde como si fueran al cine: con palomitas, tiendita en la cocina, boletos y una selección de sus películas favoritas.
9.- Inventen una canción con palabras aleatorias que meterán en un frasco e irán sacando poco a poco. Se convertirá en su canción personal.
10.- Hacer máscaras de sus personajes favoritos con periódico pegamento y agua.

TRABAJO EN CASA

YO TRABAJO EN CASA

Cuento 
El más poderoso

ACTIVIDADES POR GRADO


PREESCOLAR

PRIMERO

SEGUNDO

CUARTO Y QUINTO


PRACTICO EN CASA...

                 Leo y desarrollo en mis cuadernos

                  Actividad


23 de abril día del idioma 

Dibujo en mi cuaderno

lunes, 20 de abril de 2020

DÍA DEL IDIOMA

Este próximo 23 de abril celebraremos el día del idioma español, por ello, los invito a conocer un poco de la historia.

                                


Conozcamos un poco de Don Quijote de la Mancha